Si seguimos hablando de ídolos de Alianza Atlético de Sullana, otro de los primeros nombres que se nos viene a la mente en el año del Centenario es la figura del gran Jorge «Agapo» Gonzáles.
Nació en Mallaritos, cuna de grandes futbolistas de la provincia de Sullana, y luego de su paso por el Deportivo Mallares formó parte del Vendaval del Norte, donde gracias a sus buenas actuaciones en la zaga central fue llamado a la selección de Perú, donde en aquella época era prohibida para los provincianos.
A su llegada al cuadro sullanero, según relata en su artículo De Chalaca, Ágapo no era todavía titular en Alianza Atlético. De hecho, la zaga central estaba conformada por Alejandro Lavalle y Freddy Berlanga, figuras inamovibles de aquel equipo dirigido por el ‘Tano’ Bártoli que arrasó en el Regional Norte y luego punteó el Descentralizado durante casi todas las fechas hasta quedar segundo en la jornada final, detrás de Sporting Cristal.
En la segunda Liguilla, los churres mantuvieron la primera opción de llegar a la Copa Libertadores hasta caer ante Universitario en la última fecha. Gonzáles solo alternó en algunos partidos del certamen, incluso en varios de ellos como volante, recuerda el portal web.
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SE FORJA EL CAUDILLO
Para 1989, Lavalle se marchó a Alianza Lima y la oportunidad le llegó a Ágapo. José Fernández era el nuevo DT de los churres y apostó por un nuevo sistema defensivo. En el arco, Pedro ‘Gatti’ Sandoval cedió su lugar a Miguel Ego Aguirre. Y en la zaga, se consolidó el célebre cuarteto cuyos nombres hasta hoy son repetidos como cantaleta en la margen del Chira: Sanjinez – Berlanga – Ágapo – García Panta.
Con esas y otras figuras como los hermanos Jorge y José Zapata (el recordado ‘Pata de Rana’), aquel Alianza Atlético de 1989 estuvo otra vez a un tris de llegar a la Libertadores en la Liguilla del I Regional, cuando en la última fecha dio el batacazo y derrotó al Alianza Lima de Miguel Company por 2-1 en el Nacional. Eran las épocas en que los churres tenían de hijos a sus tocayos de Lima, con quienes compartían por entonces exactamente el mismo diseño de camiseta.
Esa vez la ilusión de la Copa para Ágapo y compañía se frustró en cotejo definitorio ante Cristal. Y aunque en el II Regional -ya con José del Castillo como DT- los churres se cobraron la revancha al eliminar a los celestes en el Octogonal por el pase a la Liguilla vía penales, en defeccionaron y quedaron en quinto puesto, muy lejos del futuro campeón Unión Huaral.
Finalmente, una nueva oportunidad de Copa para esa emblemática oncena churre se presentaría en la Liguilla del II Regional de 1990. Con Bártoli de vuelta en el banco y ante un Nacional abarrotado, Alianza Atlético inició el certamen dando un nuevo golpe en la cátedra: un nuevo triunfo sobre Alianza Lima con golazo de Javier Torres con un sombrerito sobre Purizaga. Esa tarde del verano del 91’, Ágapo fue de los mejores del campo y anuló por completo a Rosinaldo Lopes, piloto del ataque victoriano. No obstante, posteriores derrotas ante Boys y Universitario alejaron al ‘Vendaval’ de la Copa por tercera temporada consecutiva.
EL OCASO DE SU CARRERA
Después de 8 años en la institución, El Pato como también era conocido cariñosamente, pasó a las filas del Sport Boys en 1995 para luego pasar al Torino, donde perdió la categoría en 1997.
El siguiente año alternó unos meses en Unión Minas de Cerro de Pasco antes de regresar al Alianza Atlético, club con el cual disputó su último partido.
Tras culminar su carrera como jugador se dedicó a estudiar para desarrollar la carrera de director técnico de fútbol, donde tuvo a cargo las divisiones menores de Universitario. Aquí formó a Andy Polo y Edinson Flores.